viernes, 28 de abril de 2017

“Medjugorje, es un fenóemno indudable que no apreciamos suficientemente”

21/4/2017 – El Obispo Franjo Komarika: “Medjugorje, es un fenóemno indudable que no apreciamos suficientemente”.

Mons. Franjo Komarica, obispo de Banja Luka, ha concedido una extensa entrevista a la agencia de publicidad turca “Anadolija”.  Durante la entrevista se ha detenido en Medjugorje, cuyo fenómeno –ha dicho– es indudable.
No solamente en Bosnia Herzegovina y en Europa, sino en el mundo entero se sabe que Medjugorje existe “de hecho” como un fenómeno en el ámbito del mundo cristiano, y que las personas van allí por distintos motivos.  Es más: según los datos disponibles, los cristianos –y también muchos no cristianos– van allá en busca de paz de espíritu, pero sobre todo para encontrar un sentido a sus vidas.
«Sabiendo que provengo de Bosnia Herzegovina, muchas veces viajando por el mundo me han preguntado por Medjugorje.  Mucha gente conoce Medjugorje y muchos de ellos me han comentado que, cuando han estado allí, han vivido algo muy concreto que luego se ha convertido en su futura vida espiritual y su vida de compromiso social en el lugar donde residen.  Esto es un hecho.  No soy un profeta, pero soy el obispo más anciano de Bosnia Herzegovina; y habiendo tenido la posibilidad, por encargo oficial, de seguir directamente el fenómeno de  Medjugorje, no he dudado nunca del hecho que, independientemente de la veracidad o no de las apariciones –es decir, de las declaraciones de los videntes–, hay una realidad sobrenatural que habla no solo a muchos corazones y muchas almas, sino a decenas de miles de personas de todos los niveles culturales y profesiones: desde deportistas hasta cantantes, desde ingenieros a políticos, de agricultores a residentes en la ciudad, desde trabajadores capacitados hasta médicos.
Desde un punto de vista sociológico, de por sí esto ya sería un fenómeno para valorar más a fondo y sacar algunas conclusiones; es más yo diría que solo sirve para el hombre contemporáneo, que está cada vez más distanciado de sí mismo y del lugar que ocupa en este mundo, que duda y no sabe qué hacer con su vida.  En la Sagrada Escritura hay una frase muy significativa: “por sus frutos los reconoceréis”.  Nosotros podemos reconocer, a través de los frutos que aportamos, cuán creíbles somos en la medida en que pasamos de las palabras a los hechos.  Uno de los apóstoles de Jesús dice que la fe sin las obras está muerta.
Ir a Medjugorje sirve a la gente, que viaja incluso varias veces, no solo para su vida espiritual, sino también en general, en sus esfuerzos encaminados a mejorar el entorno en el que viven, dice Komarica:
«Esto no podría acontecer sin una intervención de Dios, que se puede definir como se quiera.  Por eso, desde que entré en la historia de Medjugorje, he estado siempre convencido de que este fenómeno persistirá y este será un lugar de peregrinación para todos aquellos que saben lo que significa una peregrinación, ya que se ven obligados a viajar hasta allí porque algo les llama en su interior.  Lo confirma el número de personas que van a Medjugorje desde todos los rincones del mundo, que ahorran para poder pasar unos pocos días en silencio y para confesarse.  A través del sacramento de la Reconciliación, de hecho, la persona se pone delante de Dios y Él le cura el alma para, después, poder escuchar la voz de la propia conciencia así como el consuelo que le da el ministro de Dios: “Oh! Hombre, ¡Dios te ama, el Cielo te ama!  Tú no has sido creado para sobrevivir, es decir, solo para existir aquí y ahora, sino que has sido creado para ese futuro que Cristo Resucitado tiene preparado para ti”.  Por eso necesitamos este oasis en todas partes».
«Pienso –dice– que no apreciamos suficientemente el hecho de que esto haya acontecido precisamente en Bosnia Herzegovina.  Después de esta iniciativa de la Santa Sede –que yo personalmente esperaba desde hace tiempo que se pusiera en marcha, y que de cualquier forma debía ponerse en marcha– espero ciertamente que también el Papa reaccione de forma adecuada».
«Aquí se trata, antes que nada, de hacer un diagnóstico de la praxis pastoral del lugar, es decir, la forma en que se celebra la fe en las acciones litúrgicas prescritas por el Derecho de la Iglesia, y el eco que se deriva de ellas.  Ciertamente, hasta el Papa debería emitir directrices apropiadas para el futuro de Medjugorje, basándose en declaraciones de los testigos».
Fuente: https://www.facebook.com/radiomaria/posts/1394260287278584
Traducción del italiano del equipo de www.virgendemedjugorje.org

jueves, 27 de abril de 2017

+ MENSAJE DE LA VIRGEN EN MEDJUGORJE 25-04-17


“Queridos hijos, amad, orad y testimoniad mi presencia a todos los que están lejos. Con vuestro testimonio y ejemplo podéis acercar los corazones que están lejos de Dios y de Su gracia. Yo estoy con vosotros e intercedo por cada uno de vosotros para que, con amor y valentía, testimoniéis y animéis a todos aquellos que están lejos de mi Corazón Inmaculado. ¡Gracias por haber respondido a mi llamada!”

lunes, 3 de abril de 2017

+ MENSAJE DE LA VIRGEN EN MEDJUGORJE 02-04-17



“Queridos hijos, apóstoles de mi amor, está en vosotros difundir el amor de mi Hijo a todos aquellos que no lo han conocido; está en vosotros, pequeñas luces del mundo, a las que yo con amor maternal os enseño a brillar con claridad en todo su esplendor. La oración os ayudará, porque la oración os salva a vosotros, la oración salva el mundo. Por eso, hijos míos, orad con palabras, con sentimiento, con amor misericordioso y con el sacrificio. Mi Hijo os ha mostrado el camino, Él, que se ha encarnado y ha hecho de mí el primer cáliz, Él, que con su supremo Sacrificio os ha mostrado cómo se debe amar. Por eso, hijos míos, no tengáis miedo a decir la verdad. No tengáis miedo, vosotros mismos, de cambiar y de cambiar el mundo difundiendo el amor y haciendo todo para que mi Hijo llegue a ser conocido y amado, al amar a los demás en Él. Yo, como Madre, estoy siempre con vosotros. Oro a mi Hijo para que os ayude a que en vuestra vida reine el amor: el amor que vive, el amor que atrae, el amor que da la vida. Ese es el amor que os enseño, un amor puro. Está en vosotros, apóstoles míos, reconocerlo, vivirlo y difundirlo. Orad con sentimiento por vuestros pastores, para que con amor puedan testimoniar a mi Hijo. Os doy las gracias”