lunes, 26 de abril de 2021

+ MENSAJE DE LA VIRGEN EN MEDJUGORJE 25-04-2021

 

 “¡Queridos hijos! Hoy os invito a dar testimonio de vuestra fe en los colores de la primavera; que ésta sea una fe de esperanza y valentía. Hijos míos, que vuestra fe no vacile ante ninguna situación, ni siquiera en este tiempo de prueba. Id valientemente con Cristo Resucitado hacia el Cielo, que es vuestra meta. Os acompaño por este camino de santidad y os pongo a todos en mi Corazón Inmaculado. ¡Gracias por haber respondido mi llamada! “

viernes, 26 de marzo de 2021

+ MENSAJE DE LA VIRGEN EN MEDJUGORJE 25-03-21

 

 “Queridos hijos, también hoy estoy con vosotros para deciros: hijos míos, quien reza no le tiene miedo al futuro y no pierde la esperanza. Vosotros habéis sido elegidos para llevar alegría y paz, porque sois míos. He venido aquí con el nombre de Reina de la Paz, porque el diablo quiere la aflicción y la guerra; quiere llenar vuestro corazón con el miedo al futuro; y el futuro es de Dios. Por eso, sed humildes y orad, y dejad todo en manos del Altísimo que os ha creado. ¡Gracias, queridos hijos, por haber respondido a mi llamada!”

martes, 9 de marzo de 2021

+ MENSAJE DE LA VIRGEN EN MEDJUGORJE 25-02-21


“¡Queridos hijos! También hoy Dios me ha permitido estar con vosotros para invitaros a la oración y al ayuno. Vivid este tiempo de gracia y sed testigos de esperanza porque, os repito, hijos míos: con la oración y el ayuno incluso las guerras pueden ser suprimidas. Hijos míos, creed y vivid en la fe, y con la fe este tiempo de gracia; mi Inmaculado Corazón no os abandona a ninguno de vosotros en el desasosiego si recurre a mí. Intercedo por vosotros ante el Altísimo y oro por la paz en vuestros corazones y por la esperanza en el futuro. ¡Gracias por haber respondido mi llamada”

martes, 26 de enero de 2021

+ MENSAJE DE LA VIRGEN EN MEDJUGORJE 25-01-21

 

“Queridos hijos, en este tiempo os invito a la oración, al ayuno y a la renuncia, para que seáis más fuertes en la fe. Este es el tiempo del despertar y del renacer. Así como la naturaleza se da, también vosotros, hijos míos, pensad en todo lo que habéis recibido; sed portadores alegres de la paz y del amor para que estéis bien en la tierra. Anhelad el cielo, porque en el cielo no hay tristeza ni odio. Por eso, hijos míos, decidíos de nuevo por la conversión y que la santidad reine en vuestras vidas. ¡Gracias por haber respondido a mi llamada!”