lunes, 26 de noviembre de 2012

+ MENSAJE DE LA VIRGEN EN MEDJUGORJE 25-11-12


“¡Queridos hijos! En este tiempo de gracia, os invito a todos vosotros a renovar la oración. Abríos a la Santa Confesión, para que cada uno de vosotros pueda aceptar mi llamada con todo el corazón. Yo estoy con vosotros y os protejo de la perdición del pecado, y vosotros debéis abriros al camino de la conversión y de la santidad, para que vuestro corazón arda de amor por Dios. Concededle tiempo, y Él se os donará a vosotros, y así, en la voluntad de Dios, podréis descubrir el amor y la alegría de vivir. Gracias por haber respondido a mi llamada”.

martes, 20 de noviembre de 2012

+ FIESTA DE LA MISERICORDIA - CAP. 9




A todos los que se acogen confiadamente a Su Misericordia y renovados en espíritu regresan a su quehacer diario, Jesús no quiere que las Gracias recibidas queden en la intimidad de la persona, desea ardientemente que esa experiencia de fe y de vida nueva, sea transmitida a los demás para que ellos también conozcan y experimenten la Bondad y el Amor Misericordioso de Jesús.
En el apartado D. 742, explica a Santa Faustina los parámetros que tienen que regir en el comportamiento de toda persona renovada en espíritu por Su Misericordia: Hija Mía, si por medio de ti exijo de los hombres el culto a Mi misericordia, tú debes ser la primera en distinguirte por la confianza en Mi misericordia. Exijo de ti obras de misericordia que deben surgir del amor hacia Mí. Debes mostrar misericordia al prójimo siempre y en todas partes. No puedes dejar de hacerlo ni excusarte ni justificarte.
Te doy tres formas de ejercer misericordia al prójimo: la primera – la acción, la segunda – la palabra, la tercera – la oración. En estas tres formas está contenida la plenitud de la misericordia y es el testimonio irrefutable del amor hacia Mí. De este modo el alma alaba y adora Mi misericordia. Sí, el primer domingo después de Pascua es la Fiesta de la Misericordia, pero también debe estar presente la acción y pido se rinda culto a Mi misericordia con la solemne celebración de esta Fiesta y con el culto a la imagen que ha sido pintada. A través de esta imagen concederé muchas gracias a las almas; ella ha de recordar a los hombres las exigencias de Mi misericordia, porque la fe sin obras, por fuerte que sea, es inútil.
Pero no sólo quiere Jesús, que transmitamos nuestra experiencia a los demás, sino que también nos da tres formas de ejercer la misericordia, para que no sólo con palabras sino también con obras, realicemos esa labor; para que siendo misericordiosos con nuestros hermanos, demos testimonio del amor que hacia Él tenemos, es como mejor se alaba y adora a Su Misericordia.
Sentencia que el primer domingo después de Pascua, es la Fiesta de la Misericordia, para que no desaprovechemos el cúmulo de gracias y dones que de Su corazón traspasado vierte a cuantos a Él se acercan con confianza.
Nuevamente señala la importancia del culto a Su Imagen, por la cual, concederá innumerables gracias; y ese culto debe recordarnos siempre, que en Su vida terrenal, no sólo habló, sino que con obras, dio testimonio de Su Inagotable e inconcebible Misericordia, y así lo hizo hasta las últimas consecuencias, dando testimonio de Su fidelidad a Dios Padre y a Sus hermanos los hombres y mujeres de todos los tiempos.




miércoles, 14 de noviembre de 2012

+ FIESTA DE LA MISERICORDIA - CAP. 8

Todos los días son buenos para comprobar, que ante una, varias o muchas decisiones equivocadas que hemos tomado, en un momento de nuestra vida o en el transcurso de la misma, si reconocemos los errores y el daño que hemos causado, a nosotros, a nuestros hermanos y a Dios, y con humildad y confianza nos acercamos a Su sustituto para vaciar todas nuestras impurezas; y en el momento de la absolución sentir la paz de la reconciliación con Dios y experimentar la cercanía del Amor Misericordioso, no porque Él se haya acercado, no, es que al quedar nuestro espíritu limpio, como atraído por un potentísimo imán recorre instantáneamente la distancia que nuestras equivocaciones nos habían alejado.  
Pero hay un Día en el que las compuertas de las entrañas de la Misericordia, están totalmente abiertas, para derramar sobre todos, y muy especialmente a los pobres pecadores, las gracias y dones del Amor Misericordioso de Dios. Ése día es la Fiesta de la Misericordia. Jesús nos da una amplia explicación en el siguiente apartado del Diario de Santa Faustina
D. 699.- Una vez, oí estas palabras: Hija Mía, habla al mundo entero de la inconcebible misericordia Mía. Deseo que la Fiesta de la Misericordia sea refugio y amparo para todas las almas y, especialmente, para los pobres pecadores. Ese día están abiertas las entrañas de Mi Misericordia. Derramo todo un mar de gracias sobre las almas que se acercan al manantial de Mi Misericordia. El alma que se confiese y reciba la Santa Comunión obtendrá el perdón total de las culpas y de las penas. En ese día están abiertas todas las compuertas divinas a través de las cuales  fluyen  las gracias. Que ningún alma tema acercarse a Mí, aunque sus pecados sean como escarlata. Mi misericordia es tan grande que en toda la eternidad no la penetrará ningún intelecto humano ni angélico. Todo lo que existe ha salido de las entrañas de Mi misericordia. Cada alma respecto a Mí, por toda la eternidad meditará Mi amor y Mi misericordia. La Fiesta de la Misericordia ha salido de Mis entrañas, deseo que se celebre solemnemente el primer domingo después de Pascua. La humanidad no conocerá la paz hasta que no se dirija a la Fuente de Mi misericordia.
No dejemos pasar alegremente un día como éste, sin pena ni gloria. Jesús pone a nuestro alcance Su Indulgencia Plenaria. En el Sacramento de la Reconciliación, el sacerdote, sustituto de Jesús, en Su nombre nos perdona las culpas, pero tiene que ponernos una pena o penitencia acorde a nuestras culpas, que sirve como reparación por el daño o daños causados.
En el domingo de la celebración de la Fiesta de la Misericordia, Jesús ofrece el perdón total de las culpas y de las penas a quien se confiese y reciba la Santa Comunión, no sólo nos limpia de nuestros pecados, sino que además repara por completo nuestro espíritu, para que permanezcamos en Él siempre; nos permite poner a cero nuestros contadores sin tener en cuenta el altísimo número que hayamos alcanzado, es volver a empezar de nuevo el Camino, con la confianza plena puesta en Él, para que algún día al igual que San Pablo podamos decir: “ Se de quién me he fiado”

viernes, 9 de noviembre de 2012

+ FIESTA DE LA MISERICORDIA - CAP. 7

Dios Padre no se cansa de esperar a los que siguiendo su libre criterio han tomado decisiones y caminos equivocados. Y Jesús Hijo de Dios y Hermano nuestro, tampoco se cansa de llamarnos y de mostrarnos el auténtico Camino que Él conoce perfectamente que conduce a la Verdad y la Vida. Jesús ansía y añora permanecer en nosotros y así poder protegernos, bendecirnos y guiarnos a las estancias que nos tiene preparadas en la Casa del Padre.
En la segunda parte del apartado D. 570, dice Jesús: No encontrará alma ninguna la justificación hasta que no se dirija con confianza a Mi misericordia y por eso el primer domingo después de Pascua ha de ser la Fiesta de la Misericordia. Ese día los sacerdotes han de hablar a las almas sobre Mi misericordia infinita. Te nombro dispensadora de Mi misericordia. Dile al confesor que la imagen esté expuesta en la iglesia y no en el convento dentro de la clausura. Por medio de esta imagen colmaré a las almas con muchas gracias, por eso, que cada alma tenga acceso a ella.
Jesús vuelve a exhortarnos, sobre la importancia de la Fiesta de la Misericordia. Insta a los sacerdotes para que hablen de Su Misericordia Infinita. E insiste en la necesidad de que a Su Imagen no se le restrinja el acceso a las almas, sino todo lo contrario, que esté expuesta en la Iglesia, para que por medio de ella nos colme con muchas gracias.
Tengamos siempre presente, que Dios nunca nos abandona, sólo nos apartan de Él, nuestras propias decisiones, y sólo con plena confianza en Su Infinita e Inagotable Misericordia, seremos justificados y retornados a Su Presencia.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

+ FIESTA DE LA MISERICORDIA - CAP. 6

Imagen y Fiesta, Veneración y Júbilo. Si con confianza Veneramos la Imagen, con alegría participaremos en el Júbilo de la Fiesta que nos sumerge en el fruto del Amor de Dios que es la Misericordia.
D. 420.- El primer domingo después de la Pascua de Resurrección, es decir, Fiesta de la Misericordia del Señor, clausura del Jubileo de Redención. Cuando fuimos a esta solemnidad, el corazón me latía de alegría por estar unidas estas dos solemnidades tan estrechamente. Pedí a Dios la misericordia para las almas pecadoras. Cuando terminó el oficio y el sacerdote tomó el Santísimo Sacramento para impartir la bendición, súbitamente vi al Señor Jesús con el mismo aspecto que tiene en esta imagen. El Señor impartió su bendición y los rayos se extendieron sobre todo el mundo. De repente vi una claridad inaccesible en forma de una habitación de cristal, tejida de ondas de luz impenetrable a cualquier criatura o espíritu. Para entrar en la claridad [había] tres puertas y en ese instante Jesús, con el mismo aspecto que tiene en la imagen, entró en aquel resplandor a través de la segunda puerta, hasta el interior de la unidad. Es la Unidad Trinitaria que es inconcebible, infinita. Oí la voz: Esta Fiesta ha salido de las entrañas de Mi misericordia y está confirmada en el abismo de Mis gracias. Toda alma que cree y tiene confianza en Mi misericordia, la obtendrá.
Creer y confiar, dos requisitos fundamentales en la historia de la relación de Dios con el hombre y la mujer desde su creación. Adán y Eva por no creer y confiar en las instrucciones que Dios les dio sobre el Árbol del Conocimiento, de la Verdad y de la Vida, se dejaron convencer por los argumentos de la serpiente, y comiendo del fruto del Árbol prohibido, se introdujo el mal en sus cuerpos, y al perder su pureza, a Dios no le quedó mas alternativa que impedir que siguieran en Su Presencia.
Abraham por el contrario sí creyó y confió en la Palabra que Dios le había dado. A pesar de la ancianidad que él y su esposa tenían, y de que hasta ese momento no habían tenido hijos, creyó y confió en que, lo que Dios le había dicho, se cumpliría, porque para Abraham, Dios todo lo puede.
Y de inmediato mandó levantar el campamento, reunir sus rebaños y con todos los criados se puso en camino hacia la tierra que Dios le había prometido, que le haría padre de una descendencia tan abundante y numerosa como las estrellas del cielo o las arenas del mar.
Así fue como Abraham puso en marcha el Plan de Salvación, que Dios había previsto, para rescatar a todos Sus hijos del mal y de la muerte, para que pudiéramos permanecer siempre en Su Presencia, como en su día estuvieron Adán y Eva.
Dos claros ejemplos, de los miles que podemos encontrar en las Sagradas Escrituras, de que Dios desea siempre lo mejor para nosotros, nos avisa, nos previene, pero es escrupulosamente respetuoso con el libre criterio que nos concedió, y sólo nosotros somos responsables de nuestras decisiones.   

 

sábado, 3 de noviembre de 2012

+ FIESTA DE LA MISERICORDIA - CAP. 5

Santa Faustina con sus limitados recursos, hace todo lo que puede para cumplir con la voluntad expresada por Jesús y se pone manos a la obra de inmediato pero…
D. 341.- Una mañana, después de haber abierto la puerta para dejar salir a nuestra gente que traía el pan, entré un momento en la pequeña capilla, para hacer a Jesús una visita de un minuto y medio y para renovar las intenciones del día. Oh Jesús, hoy todos los sufrimientos, las mortificaciones, las plegarias, las ofrezco por el Santo Padre para que apruebe esta Fiesta de la Misericordia. Pero, Jesús, debo decirte todavía una palabra. Estoy muy sorprendida de que me ordenas hablar de esta Fiesta de la Misericordia, mientras esta Fiesta según me dicen, ya existe, entonces, ¿para qué he de hablar de ella?
Y Jesús me contestó: ¿Quién, de entre la gente, sabe de ella? Nadie. Y hasta aquellos que han de proclamarla y enseñar a la gente esta misericordia, muchas veces ellos mismos no lo saben; por eso quiero que la imagen sea bendecida solemnemente el primer domingo después de Pascua y que se la venere públicamente para que cada alma pueda saber de ella.
Curioso como Jesús hace las cosas, y sorprende a Santa Faustina. Claro que Él conocía la existencia previa de esta Fiesta el primer domingo después del domingo de Resurrección, pero es evidente que la repercusión, conocimiento e importancia de la misma era prácticamente nulo; de hecho Santa Faustina que ya llevaba seis años en la Congregación Religiosa, ni siquiera sabía que existía.
De la misma manera que Jesús durante su etapa pública, vio necesario que Pedro, Santiago y Juan, conocieran Su verdadera dimensión Divina cuando se Transfiguró delante de ellos en el Monte Tabor. Jesús quiere Transfigurar la Fiesta de la Misericordia.
A ellos que conocían Su aspecto humano, les deslumbro con Su aspecto Divino. A nosotros, que sólo Le conocemos por los hechos descritos en las Sagradas Escrituras, nos muestra Su aspecto humano, en el que está contenida Su dimensión Divina, de la que nos muestra una pequeñísima parte al levantar con el índice y el pulgar un poco Su túnica, permitiendo que de Su Espíritu salgan los dos rayos que harán “Bienaventurados a cuantos vivan a la sombra de ellos, porque no les alcanzará la justa mano de Dios”
Jesús no quiere que se siga hablando de la misericordia, como un atributo, cualidad, gracia o manifestación Divina, como se refleja en muchas situaciones que aparecen en el Antiguo Testamento, cuando el pueblo Judío caía en desgracia después de haberse apartado de Dios, y apesadumbrado y abatido, alzaban sus brazos y sus súplicas al Único que podía salvarlos.
Lo que Jesús quiere es transfigurar la Fiesta de la Misericordia a través de Su Imagen: “quiero que la imagen sea bendecida solemnemente el primer domingo después de Pascua y que se la venere públicamente para que cada alma pueda saber de ella”.
Él es la Misericordia, a través de la veneración de Su Imagen quiere hacernos partícipes de la auténtica Felicidad en la celebración de la Fiesta de la Misericordia Divina.
Esa auténtica Felicidad, es una realidad concreta que todos tenemos a nuestro alcance, desde el pecador empedernido más grande del mundo, hasta el más alto representante de Jesús aquí en la Tierra, Su Vicario el Santo Padre. Sólo de nosotros depende aceptarla y acogerla en nuestro espíritu y en nuestro corazón, para que haciéndola viva en nosotros podamos transmitirla a los demás.


viernes, 2 de noviembre de 2012

+ MENSAJE DE LA VIRGEN EN MEDJUGORJE 02-11-12


“Queridos hijos, como Madre os pido que perseveréis como mis apóstoles. Oro a mi Hijo para que os conceda sabiduría y fuerza divinas. Oro para que, según la verdad de Dios, enjuiciéis todo lo que os rodea, y os opongáis firmemente a todo aquello que desea alejaros de mi Hijo. Oro para que por mi Hijo testimoniéis el amor del Padre Celestial. Hijos míos, se os ha concedido la gran gracia de ser testimonios del amor de Dios. No toméis a la ligera esa responsabilidad confiada a vosotros. No aflijáis mi Corazón materno. Como Madre deseo confiar en mis hijos, en mis apóstoles. Por medio del ayuno y de la oración, abridme el camino para que pida a mi Hijo que esté cerca de vosotros, y para que, por medio de vosotros, sea santificado Su Nombre. Orad por los pastores, porque nada de todo esto sería posible sin ellos. ¡Os doy las gracias!”

+ FIESTA DE LA MISERICORDIA - CAP. 4

 
Poco tiempo después, a una pregunta que Santa Faustina por indicación de su confesor, hace a Jesús, encontramos en el Diario las siguientes palabras:
D. 299.- Una vez cuando el confesor me mandó preguntar al Señor Jesús por el significado de los dos rayos que están en esta imagen; contesté que sí, que se lo preguntaría al Señor.
Durante la oración oí interiormente estas palabras: Los dos rayos significan la Sangre y el Agua. El rayo pálido simboliza el Agua que justifica a las almas. El rayo rojo simboliza la Sangre que es la vida de las almas…

Ambos rayos brotaron de las entrañas más profundas de Mi misericordia cuando Mi Corazón agonizante fue abierto en la cruz por la lanza.

Estos rayos protegen a las almas de la indignación de Mi Padre. Bienaventurado quien viva a la sombra de ellos, porque no le alcanzará la justa mano de Dios. Deseo que el primer domingo después de la Pascua de Resurrección sea la Fiesta de la Misericordia.

Pide a mi siervo fiel que en aquel día hable al mundo entero de esta gran misericordia Mía; que quien se acerque ese día a la Fuente de Vida, recibirá el perdón total de las culpas y de las penas.

La humanidad no conseguirá la paz hasta que no se dirija con confianza a Mi misericordia.

En la última parte de la respuesta, vuelve a manifestar Su deseo sobre el día de la Fiesta, y deja unas instrucciones muy claras para Su siervo fiel (el Padre Sopòcko) y por extensión a todos los sacerdotes.

Como prueba de la importancia de ésta Fiesta, para los que acepten Su invitación y vayan, con espíritu confiado y dispuesto vaciar todas sus miserias en el Sacramento de la Reconciliación, Él los acogerá en Su Misericordia, y les obsequiará con “el perdón total de las culpas y de las penas”, es decir la Indulgencia Plenaria, en la que el espíritu queda limpio de toda mancha de pecado y por lo tanto no se necesita la purificación de la pena, somos recatados del mal y de la muerte.

Jesús finaliza la respuesta, con una sentencia que reafirma y consolida la importancia de todo lo descrito anteriormente “La humanidad no conseguirá la paz hasta que no se dirija con confianza a Mi misericordia”.

Todos los que veneramos la Imagen de Jesús y confiamos plenamente en Su Misericordia, tenemos que grabarnos en nuestro corazón y en nuestro espíritu ésta sentencia, que debe servirnos de aliciente y acicate en la necesidad de divulgar incansablemente la Veneración a la Misericordia Divina.